No soy escritora perfecta, soy mujer en camino.Soy fuego, y aquí estoy para encenderte.”
Cada caída me enseñó a levantarme más fuerte. Hubo días en los que pensé que no podía más, en los que el peso de mis propias batallas me hacía creer que no había salida. Pero fue en ese mismo dolor donde descubrí algo esencial: el fuego que me consumía también podía ser el fuego que me levantara. Comprendí que la resiliencia no nace en los días fáciles, sino en los momentos en que decides no rendirte aun cuando todo arde dentro de ti. Por eso escribo y comparto mi voz, no desde la perfección, sino desde la verdad de mis cicatrices. Hoy convierto mis sombras en palabras y mis heridas en fuerza, porque sé que no soy la única que ha sentido el cansancio del alma. Y si estás aquí leyendo esto, quiero que lo recuerdes: tú también puedes. Siempre. Mientras amanezca, siempre habrá una oportunidad de volver a empezar.”
“El fuego que me consumía también podía ser el fuego que me levantara.”).